¿A partir de qué edad podemos poner a nuestro bebé en el parque infantil?

Cada etapa del crecimiento de los bebés requiere de ciertos cuidados y del uso de accesorios diseñados especialmente para ellos. Todos están pensados tanto para su protección y seguridad como para fomentar su desarrollo psicomotor. Los parques para niños y bebés son un claro ejemplo de ello.

En este artículo, te vamos a enseñar las precauciones y consejos para el uso de forma correcta y saludable de los parques infantiles. Veamos cuándo es recomendable su uso y qué medidas debemos tomar antes de ponerlos dentro. Solo así podrán aprovechar realmente todos sus beneficios de manera segura.

¿A partir de qué edad poner al bebé en el parque?

¿Cuándo poner al bebé en el parque? según expertos, la etapa ideal es desde los 6 meses o desde el momento en el que el niño aprende a sentarse solo. Por esta razón, la superficie del corralito debe ser lo suficientemente grande y cómoda para gatear y dar sus primeros pasos.

De acuerdo a la Guía Práctica para padres de la Asociación Española de Pediatría, desde los 6 hasta los 12 meses es cuando los niños aprenden a sentarse son más libres a la hora de moverse e imitar a los adultos en su desempeño motor. Por eso, ellos también recomiendan empezar a utilizarlos desde esa edad.

Precauciones antes de meter al niño

Es importante que sepas que cada niño tiene su propio ritmo y curva de aprendizaje y que algunos van a tardar más tiempo en adaptarse a este nuevo mundo de entretenimiento. Antes de poner al bebé en el parque, debes considerar estos aspectos para su máxima protección.

  • Instala este espacio en un lugar ventilado, fresco, alejado del contacto de los rayos solares de forma directa, de la calefacción y de muebles con esquinas puntiagudas. La mayoría de estas instalaciones cuentan con barras seguras para evitar la entrada de mascotas o la salida inesperada del niño.
  • Hay que subrayar que la instalación debe estar ubicada en el mismo espacio donde se encuentra el adulto, como el salón, una habitación o el jardín, en caso de que se quiera disfrutar del aire libre.
  • Antes de colocar al bebé, háblale y enséñale de manera tierna que ese es su espacio de juegos y que no lo abandonarás porque estarás cerca realizando tus actividades. Con el fin de hacer sentir a tu hijo más familiarizado con el nuevo espacio, acompáñalo con sus juguetes o sus osos de peluche favoritos.
  • Algunos modelos incluyen ruedas. Asegúrate de bloquearlas antes de utilizar el parque. Aprovecha que algunas instalaciones son portátiles y tienen un peso ligero para cambiarlo de lugar y ofrecerle al niño otro entorno y evitar que se aburra. Además, así puede acompañarte allá donde estés.
  • Los fabricantes recomiendan no usarlos durante más de 30 minutos porque el niño seguramente se sentirá agobiado de estar en un mismo lugar o en una misma posición por un tiempo prolongado. Por supuesto, esto también depende del tipo de parque y de su tamaño.

Consejos de uso

Este tipo de áreas de juegos deben hacer sentir al bebé seguro y protegido. Pero, para que esto suceda, los padres o el cuidador deben enseñarle de forma progresiva y gradual a descubrir este mundo adaptado a sus habilidades y necesidades.

Primero, acompáñalo en los primeros momentos hasta que se acostumbre a estar solo y evitar la sensación de abandono. Prepara la transición con sus juguetes favoritos y con mantas para darle comodidad y seguridad.

Finalmente, evita dejarlo solo durante mucho tiempo y nunca lo uses como lugar de castigo.

Elementos y accesorios que pueden beneficiarse

Algunos accesorios pueden ser sus juguetes favoritos para hacerlo sentir más cómodo y protegido. Otros accesorios son pequeñas almohadas acolchadas que se colocan en las barras para evitar que tu hijo se golpee y pequeños colchones que ayuden a que la superficie sea más blanda y les proteja de posibles caídas.

Asimismo, se pueden incluir pelotas de plástico no tóxico para desarrollar sus sentidos y su movilidad. Algunos modelos traen su propia bolsa de viaje para su almacenaje y asas para un fácil traslado. Te dejamos algunos de los mejores accesorios para parque infantil que puedes encontrar actualmente:

Cómo elegir el parque perfecto

Para elegir el parque ideal para tu bebé, debes empezar comprobando que se cumplan los parámetros de seguridad e higiene. Para ello, empieza revisando sus materiales de fabricación. Los parques más seguros están hechos de aluminio ligero, flexible y resistente en una estructura estable y ergonómica que distribuyen el peso de forma homogénea.

En caso de incluir colchón o suelo suave, debe de estar confeccionado con algodón de calidad u otras fibras transpirables, no tóxicas, hipoalergénicas y cómodas. También es recomendable que sus tejidos y revestimientos se puedan lavar en lavadora.

En un sentido más práctico, el sistema de apertura y cierre deben ser fáciles de manejar. Nos referimos sobre todo a si tienen puertas y cierres de seguridad. Este último punto es relevante para evitar que el niño o la niña salgan de la zona sin que tú estés presente.

Por supuesto, la seguridad es lo más importante y esto se comprueba al leer en la etiqueta el cumplimiento de la normativa de juguetes infantiles de España y de la UE.

Otra ventaja que agradecerás como padre son los diseños compactos y plegables, ya que son fáciles de utilizar, transportar y guardar con el fin de llevarlo de viaje o guardarlo.

Como has visto, los fabricantes han innovado al crear modelos de parques cada vez más seguros. No obstante, estos cumplirán su función si los utilizas de forma correcta y sigues con las precauciones señaladas. Si estás buscando algún tipo concreto de parque, te dejamos nuestras guías de compra y comparativa en las que te ayudamos a elegir el mejor para tus necesidades y las de tu hijo: